"También ríen en los charcos los inmundos renacuajos cuando rozan el plumaje de algún cóndor que cayó"

sábado, 13 de julio de 2013

Jaque al Cine I

En esta nueva sección nos proponemos encontrar los filmes que han tratado el tema del ajedrez y ver cuáles son verdaderos íconos del deporte y cuáles serán tan sólo películas para pasar un par de horas. La idea es encontrar las que alcanzan el título de Maestro, Gran Maestro y por qué no Campeón Mundial de filmes del juego.

En la partida de hoy encontramos a dos películas de principios de los noventa: Jaque al asesino de 1992 y En busca de Bobby Fischer de 1993. Las analizaremos por separado y luego veremos qué tienen en común o en qué aspecto una aventaja a la otra para saber cuál es la triunfadora de esta jornada.


Jaque al asesino (o Knight Moves) es más un thriller que una película sobre ajedrez. Protagonizada por un apenas expresivo Christopher Lambert (la cara del afiche la mantendrá todo el film y supongo que toda su vida). Fue dirigida por el suizo-alemán Carl Schenkel.
Peter Sanderson (Lambert) es un campeón internacional que por una serie de coincidencias es el principal sospechoso en una serie de asesinatos. Al mismo tiempo que compite en el torneo tiene que ir descifrando los movimientos de ajedrez que guían al asesino para cometer sus crímenes; vía telefónica y en presencia de policías.

Hay apenas un misterio rescatable en la forma en que se mueve el asesino, jugando una partida de ajedrez con sus víctimas. Y creo que lo mejor es que cerca del desenlace el director juega con el público su propia partida “lanzándonos” un jaque y poniéndonos a prueba en la resolución del caso.
Lástima que el final sea tan previsible y absurdo, sin ninguna relación con el juego de ajedrez. Digno de una película de Jackie Chan.


En busca de Bobby Fischer se centra en la vida del ajedrecista Josh Waitzkin, más bien en su niñez. Su familia descubre por casualidad que tiene un don para el ajedrez y buscan incentivarlo contratando a un estricto profesor y haciéndolo participar en cuanto torneo exista. Lo que nos plantea el film ya desde el título es esa búsqueda norteamericana del sustituto de Bobby Fischer. ¿Hace falta presentarlo?... bueno, lo haré brevemente: aquel excéntrico y controvertido Campeón Mundial lleno de supersticiones y caprichos tanto dentro como fuera del tablero. La película va intercalando imágenes reales de Fischer y las relaciona con la vida del protagonista.

La exaltación de lo “estadounidense” recubre la película pero al menos hace una autocrítica de cómo en cada prodigio que aparece creen haber encontrado al “Nuevo Fischer” e intentan inculcarle lo agresivo de su juego dejando de lado el desarrollo propio del niño, enseñándole a ganar a cualquier precio en lugar de desarrollar sus intereses en busca de la felicidad. Entre estas dos posturas se encuentran sus dos maestros, el académico estricto y el que le enseña a jugar en el parque a pura garra y corazonada.
Si bien se centra en el juego de ajedrez la moraleja que nos deja es aplicable a cualquier competición como ya lo hemos visto, por ejemplo, en películas yanquis de boxeo. ¡Córtame la Dama y seguiré!
El reparto está repleto de caras conocidas: Ben Kingsley, Laurence Fishburne, Joe Mantengna, Joan Allen, David Paymer... Su director es Steven Zaillian.
Muy floja la banda sonora, es muy predecible y nos marca infantilmente el ritmo de cuándo y cómo emocionarnos.


En común, ambas tratan la relación de los niños con el ajedrez y los problemas que la obsesión y presión (propia o de familiares) puede causar a su vida. Jaque al asesino abre la partida con un flashback en blanco y negro recreando un juego entre dos menores que marcará su vida futura. A mi juicio la mejor escena de la película...


Lo que ambas películas tienen de malo es que caen en algunos de los preceptos del cine comercial. Si bien recrea cierto suspenso e incertidumbre que podían convertir a Jaque al asesino en un excelente film, se siguen demasiadas situaciones "pochocleras" y convencionalismos y lugares comunes del género policial. Una historia muy desaprovechada. Así mismo En busca… también presenta algunas situaciones propias del cine comercial y creo que el personaje del contrincante niño malo y el vagabundo sabelotodo del parque son demasiado trillados y de resoluciones previsibles. Y contiene escenas terriblemente infantiles, como cuando en medio de la competición encierran a los adultos.

Creo que la ganadora es En busca..., no por destacarse sino por ser la que comete menos errores burdos y además es la que muestra más situaciones con jugadas de ajedrez. La jugada de la partida final, por ejemplo es una demostración de por qué es la ganadora de hoy. Así se definió (aquel que no la vio y le interesa que raje de acá...el primer minuto no hay movimiento, pueden pensar la jugada o poner pausa, y tomarse un tiempo mayor para resolverlo:juegan las amarillas).

Pero tampoco creo que sea una película que pueda competir a nivel internacional y mucho menos que llegue al rango de Maestra.

Así que si piensan ver ambas películas, que sea un sábado a la tarde con un buen balde de pochoclos.  Yo seguiré buscando a “La película de ajedrez” en una próxima partida. Mate.