Por ser aquella mi primera vez observé atento, y sé exactamente
cómo en un instante todo sucedió.
Solo observé. Y fue un hola buen día
a toda la sala, orejear a derecha e izquierda, voltear completo para encontrarme
con una pared de azulejos color mostaza desatinado que tenía un mísero almanaque
de propaganda, y volver con la incomodidad del que es observado por todos y no
sabe qué hacer. La sorpresa por la ausencia de máquina expendedora de números para
turnos, la espera.
Los experimentados (ahora lo sé) preguntan a voz en gola quién es el último, acomodando el orden
que se debe mantener. Aún con Pepito en mis brazos alguien me anotició que venía después
de Lennon. Y antes había llegado Rancho, Nicolito, Keeper, Colita, Jackie y Kimba
(que entraron juntos), India, Edmundo y la Micha.
Hacía calor en la sala, y el olor a lejía evidenciaba que
el local necesitaba ventilación. El noticiero en la pequeña TV era de
inclinación nazi sensacionalista, el tránsito en la calle era el típico de
viernes a la tarde, agitado. La cara de rope de la recepcionista nada
tenía que envidiarle a la sala, y un teléfono sonaba lejos.
Te digo que lo vi todo y fue un instante.
Un tipo de camisa a cuadros llegó con El Titán en una de sus manos e inició el
bardo. Vio la cantidad de pacientes y con cara de gil se tiró el lance y encaró
hacia los consultorios. Saltó la bronca.
Un morocho grandote que se jactaba de tener siete ovejeros junó
al cheronca de camisa a cuadros y le salió al cruce, hubo un empujón y el amague de un cabezazo
tucumano. La vieja por el susto pegó un grito agudo y las dos chicas con tatuajes de los Beatles trataron de mediar pero el que atiende en Niccolo se ve
que venía caldeado por la rutina y metió el primer tortazo. Un gordo con cara
de cliente molesto soltando la correa le saltó al cuello desde atrás pero antes
de que se diera cuenta recibió un carterazo en el lomo, volaron cosméticos, un
cepillo y tickets de peajes. Por el otro rincón una rubia cara de alcahueta discutía
con uno de bigotes con manchas de nicotina, el jubilado de la
biaba se puso de pie y sostenía del mameluco a un flaco con las manos resecas dispuestas a
golpear. La recepcionista agitaba los brazos. Vi una piña por allá y patadas más acá, anillos enredados en pelos, un
espejito roto en el suelo, hubo gritos.
Te juro que lo vi todo y fue tan solo un instante que no me dio
tiempo a nada.
Pepito tenía las orejas hacía atrás y miraba de reojo a Colita que, sumiso,
se había echado. La Micha ni se movió dentro de su litera. Nicolito se hizo una
bola en el rincón y un poco temblaba, al tiempo que Rancho jadeaba tras el
bozal y Lennon saltaba y se subía a uno de los asientos, porte atento. India movía el rabo
con docilidad. Keeper y Kimba no hicieron otra cosa que rascarse. Jackie aprovechó la correa suelta para olerle el
culo a Edmundo, y El Titán por suerte cayó parado.
Un hermoso ejemplo de conducta por parte de los animales, claro. Que tira a la borda el uso que los humanos hacemos de "no seas animal queres?" O "que animal, que bestia."
ResponderEliminarMuy bueno.
Beso.
Muchas gracias Dana, y bienvenida.
EliminarTus Apuntes ya está entre mis "blogs amigos" así que cada tanto me paso por allá.
Beso!
Gracias por tu inteligente comentario
ResponderEliminarGracias a vos por siempre devolverlos Reco
EliminarBeso!
solo vos podes escribir asi ...placer siempre
EliminarUps Jackie oliéndole el culo a Edmundo jajaja.
ResponderEliminarMe encantó esta entrada, Frodo, un placer leerte.
Un beso.
Las Jackies son así, aprovechan la oportunidad.
EliminarMuchas gracias María
Beso!
preparate para la espera en pediatría...esto un porotito.
ResponderEliminarMe hiciste reir y pensar en India, la perra de mi hermano que va (escucha bien) a un homeopatico...
vos estabas ahi voleado y atento, como el padre primerizo que sos.
Me voy preparando Nilda, pero por ahora no.
Eliminar¿India al homeópata? ¿qué hará tu hermano, entonces? Mejor no pregunto mucho, digamos que al menos le puso buen nombre a la perra.
Beso!
Me gustaría estar avanzado en historieta, para hacer una propia, en base a lo que contaste. Daría para varias viñetas, una o dos páginas.
ResponderEliminarQue papelón que hicieron esos humanos. Mientras que las mascotas mantuvieron la calma.
Bien contado.
Me gustaría ver esa historieta, me encantaría.
EliminarEn los relatos jueveros o distintos retos ¿alguna temática dónde pueda incluir este relato? Digo, ya que siempre te dejo de garpe y no escribo nada.
Como sabrás, no me sale tan fácil.
Muchas gracias Demiurgo!
Muy bueno el relato!!
ResponderEliminarY que aprovechadora esa Jackie jajaja
Muchas gracias Eme.
EliminarComo le dije a María, las Jackies son así, puedo dar fe de ello.
Beso!
¿Y al final que pasó con el canchero, se quedó o voló?
ResponderEliminar¿Se restableció el orden de la cola?
¿No te quedaste con ganas de aplicar un correctivo?
Abrazo
Moscón: Todo eso y mucho más, la próxima semana por este mismo canal y a esta misma hora.
EliminarAbrazo!
Magnífica y divertida descripción.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Macondo
EliminarOtro abrazo para vos!
jajajaja
ResponderEliminarbuenísimo.
en un principio imagine la sala de espera de la entrada al cielo...
abrazo
Todos los Perros van al Cielo dicen, f.
EliminarLos gatos no, algunos me han rasguñado feo. Aunque me preocuparía encontrármelos abajo.
Muchas gracias
Abrazo!
¡Ja, ja! Cuánto tiempo hacía que no oía lo de "cheronca" Recuerdo a uno de mis compañeros de timba decir:"Qué te hacés el cheronca? Porque ganaste una vez, ¡te pensás que sos groso!" Supongo que viene del lunfardo.
ResponderEliminarYo creo que los perros van al cielo y los gatos a todas partes.
Abrazos, Frodo!
Borgo.
Grande Miquel!
EliminarCheronca es una manera de decir al revés (o vesre) Canchero. El canchero que marcaba la cancha (campo) de fútbol, que cortaba el pasto...se ve que tenía fama de agrandado, de ducho, de presumido.
Y si, deriva del lunfardo.
Buena definición de perros y gatos. Estos últimos andan por donde se les antoja, se hacen los cancheros desde los tejados.
Abrazo Borgo!
Hola, Frodo:
ResponderEliminarNo faltará quien te diga que este relato es sólo rocanrol, pero por eso me gusta: es sencillo en su composición y visceral en su letra.
Además, al leerte recupero la misma sensación que cuando escucho a los Stones o a la Creedence: la fantasía de imaginar las palabras que no comprendo pero sí que entiendo (o eso creo).
Ain't too proud to admit I like the way you rock it. Frodo.
Hola Nino, muchas gracias!
EliminarSabras que me cuesta mucho más escribir que pintar. Pero cuando aparece alguna idea que solo puede expresarse con letras, sale así como decís, visceral.
Qué bueno que lo compares con letras de esas dos bandas. Cuando lo escribí me fui dando cuenta que estaba utilizando muchos modismos y palabras que se usan solo en Argentina, pero debía ser así. Tal vez alguno de los detalles no se comprendan, pero en el fondo se siente.
A mí me sucede mucho con el portugués. Cuando escucho bandas brasileras por momentos no comprendo... pero en el fondo las entiendo.
Quando o que eu mais queria
Era provar pra todo o mundo
Que eu não precisava
Provar nada pra ninguém.
Abrazo Nino!!
Los animales se portaron como se supone que deben portarse las personas y las personas como se supone que se portan los animales, jajaja.
ResponderEliminarMuy bueno.
Así es Dyhego, así fue.
EliminarMuchas gracias!!!
Abrazo!
Los he visto a todos.
ResponderEliminarEscribes fotografiando.
Muy bueno.
Una pelea estupenda.
Muy bien Toro, qué bueno que así lo definas. Muchas gracias.
EliminarA veces uno anda con el objetivo atento y caza los detalles que suceden en segundos apenas.
Abrazo!
Jajajajaj
ResponderEliminarparece una peli de los Marx Brothers, la escena del camarote...
Genial, Frodo.
Gran escena, gran.
EliminarUn orgullo que la hayas relacionado, ahí pasa de todo en pocos minutos
Muchas gracias por todo Zarza